![]() |
Doña Leonor de Plantagenet |
La boda fue espectacular, y los muchos días de fiesta, música y celebración fueron preludio de un reinado que trajo un esplendor cultural a Castilla, y que puso al reino a la altura de Francia e Inglaterra en lo musical y literario, con intercambios de trovadores y poetas entre las cortes de los tres países.
En el contrato de arras matrimoniales, Doña Leonor, que tenía solo diez años, recibió entre otros lugares Burgos, Dueñas, Aguilar, Carrión, Medina del Campo... y el castillo de Curiel de Duero. Y también el compromiso de recibir la mitad de lo que su esposo conquistase a partir de entonces, que no sería poco.
Por su parte, la reina aportó a Alfonso VIII como bien dotal el ducado de Gascuña, en el sur de Francia, que de inmediato se convirtió en un avispero, foco de revueltas y levantamientos contra el rey extranjero.
![]() |
Posesiones de los Plantagenet hacia 1154 (Wikimedia Commons) |
A pesar de las ocupaciones del trono, y de los continuos viajes, los reyes tuvieron tiempo para dedicar a su relación: nada menos que diecisiete hijos tuvieron en común, y todavía tuvo Alfonso ganas de buscar distracciones con otras mozas, como Raquel, la judía de Toledo, como veremos en otra ocasión.
![]() |
Miniatura del siglo XII: Leonor y Alfonso |
La reina también colaboró para librar a Castilla de las ansias de expansión del Reino de Navarra, gracias a la influencia que Leonor ejercía sobre el vecino ducado de Gascuña.
![]() |
Monasterio de las Huelgas Reales (Zarateman, Wikimedia Commons) |
La reina de Castilla manifiesta en su testamento de 1204 su deseo de ser enterrada en Las Huelgas, y no en la catedral de Toledo, como los anteriores reyes de Castilla, Sancho III y Alfonso VII. Esta voluntad puede que tuviera más que ver con las andanzas del rey Alfonso con su amante toledana que con otro tipo de razones de estado... El caso es que esta decisión convertiría a Burgos en la capital política y a Toledo en la capital eclesiástica del reino durante los años siguientes.
Su deseo se cumplió a su muerte, el 31 de octubre de 1214, apenas veintiséis días después de la muerte de su marido Alfonso, ocurrida en Garcimuñoz, cerca de Arévalo.
![]() |
Sepulcro de Doña Leonor y Alfonso VIII en el monasterio de Las Huelgas (Lancastermerrin88, Wikimedia Commons) |
Doña Leonor había visto morir a casi todos sus hijos, y dejaba el reino en manos de un niño: Enrique I "el Chico", que afortunadamente tuvo la tutela de su hermana mayor Berenguela de Castilla, primogénita de Leonor y Alfonso, una mujer inteligente y prudente, de la que hablaremos en otro post.
A esta gran mujer, hija de reyes ingleses y franceses, hermana de Ricardo Corazón de León y de Juan sin Tierra, y madre de reyes de Castilla y de Francia, hemos querido dedicar la habitación numero 3 del hotel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por leernos... ¡agradecemos tus comentarios!